¿Qué es “aguachirri”?
Pues una forma de “aguachirle“.
La definición del wiktionary está muy bien y nos viene al pelo.
Pues eso, estamos a 27ºC en la cocina abanicándonos con un volteador de tortillas haciendo otra prueba más de granizado que no se nos convierta en sopa mientras lo fotografiamos.
Es que sufrimos mucho por tod@s vosotr@s.
Pero merece la pena para que aprendáis a hacer cosas fresquitas Y saludables.
Y los granizados pueden serlo, por supuesto.
¿Qué es un granizado?
Pues es un tipo de helado que se hace con hielo picado y algún líquido.
Es casi todo hielo pero tiene mucho sabor, textura crunchy y está bien fresquito.
¿Sabes cómo se hacen los granizados comerciales?
Pues tú compras (si tienes un bar, heladería o whatever, o lo fabricas) un sirope concentrao que lleva un porronazo de azúcar, colorante del color que debería tener la materia prima (marrón si es de café, amarillo si es de limón, etc), aroma y sabor concentrado y con suerte unas gotas del ingrediente.
Eso es lo que se mete en la máquina esa que da vueltas con el agua, que se congela y se mantiene picadita porque las aspas no paran de moverse.
Sí, estás pagando por unos cubitos de hielo con sirope.
Encima lo que más fastidia es que se te deshacen y el vaso se convierte en caldillo con un poco de hielo.
Pero es lo típico del verano.
Cómo hacer un granizado en casa
No tienes que comprar nada raro.
Solo necesitas una batidora de vaso o picadora de hielos (lo que sea, pero de vaso) y los ingredientes que te gusten.
Nada más.
La cosa funciona así: coges tus ingredientes, que normalmente son frutas, las pelas, las troceas y las pones en la batidora.
Y lo bates bien hasta que se haga un puré.
Ahora añades bien de hielos y lo bates todo junto.
Ya está.
Listo.
Granizado exprés, barato y saludable.
El truco
Mira, lo principal es que los ingredientes tengan enjundia, que sean super sabrosos en cantidades pequeñas, porque tampoco podemos echar un kilo de sandía para un vaso (por ejemplo).
Utiliza frutas maduras y muy sabrosas, no cosas sosas.
Cuando las frutas están más bien sosas hay que cocinarlas y reducirlas para concentrar el sabor, y ya estamos sudando, como para encender el fuego.
Mejor ciñámonos a lo fácil.
Lo segundo importante son las proporciones.
Aunque puedes cambiarlas libremente, lo “normal” sería 1 parte de fruta y 3 de hielo.
Si pones mucha fruta, te queda liquidillo o incluso plastoso.
Pero ojo, hay un truqui para usar más fruta: trocearla y congelarla primero.
Sí, sí.
Así de fácil.
Y encima venden frutas ya congeladas, por si no tienes espacio en el congelador.
Lo tercero es abanicarse el tamaño de los hielos.
Ya sé que da igual porque los vamos a picar, pero no se pican igual hielos gordotes que hielos más pequeños.
El de la cubitera estándar igual es un poco grande para tu picadora y salta.
Bueno, como todo, tiene remedio.
Metes los hielos en una bolsa y les das de mamporros con el rodillo de amasar.
Y de ahí a la batidora.
Vamos, que resumiendo:
Usa frutas enteras, no zumos
Congélalas primero si quieres que tu granizado tenga bien de sabor (porque puedes echar más cantidad)
Que los hielos sean pequeños, o destrózalos tú a mano
Puedes mezclar frutas con infusiones, canela, vainilla, etc
Sírvelo inmediatamente
Sobre este último punto: los granizados son para tomar en el momento, no para hacer batch cooking, no me seáis cutres.
Pues hale, te dejamos algunos ejemplos que hemos probado:
1 bol o taza de arándanos congelados + 2 tazas de hielos
3 rodajas de piña + 1 pera + 2 tazas de hielos
1 manzana + el zumo de 1/2 limón + 2 tazas de hielos
1 taza de cerezas + 2 tazas de hielos
10-12 fresas + pizca de vainilla + 2 tazas de hielos
1 melocotón + 1 rodaja de piña + 2 tazas de hielos
una rodaja bien grande de sandía sin pepitas (troceada y congelada) + 1 taza de hielos
Haznos un favor y graniza lo que te dé la gana: café, té, puchero de lentejas, curry de garbanzos, etc. y nos lo cuentas en Instagram.