Una excelente forma de degustar el sabor de este té es en forma de helado, lo que nos permite experimentar la rica tradición del té matcha en un postre moderno, refrescante y delicioso. Este helado de té matcha es muy sencillo de preparar en casa, se hace con muy pocos ingredientes para que predomine el sabor del matcha y se puede elaborar con y sin heladera. Para el éxito de esta receta es esencial utilizar un té matcha de la máxima calidad que podamos encontrar. Podemos personalizar este helado al gusto añadiendo frutas, chispas de chocolate o podemos degustarlo tal cual para disfrutar al máximo del característico sabor de este té verde japonés. Mezclamos 15 gramos de té matcha en polvo con 50 ml de leche entera hasta que no quede ningún grumo de té. Llevamos a ebullición los 200 ml de leche entera restantes junto con 500 ml de nata para montar, 100 gramos de miel, 50 gramos de azúcar blanco y media cucharadita de vainilla en pasta. Retiramos del fuego y añadimos el té matcha. Pasamos la mezcla a otro recipiente y la dejamos enfriar a temperatura ambiente.